La joven de 18 años fue seleccionada en el segundo lugar del draft global por Washington Spirit e inicia su carrera profesional. En una entrevista avisó que iba a pedir la mítica 91 de su padre en los Bulls.
Luego de una temporada para el olvido en todos los deportes de Estados Unidos por la ausencia de público, la falta de competencia y los millones de dólares en pérdidas, las esperanzas se renuevan de cara a lo que viene y con eso aparece el apasionante draft para reclutar a los mejores atlétas juveniles del mundo.
En este caso, el país norteamericano se paralizó en el fútbol femenino, que siempre fue más popular que el masculino y que cuenta con una mejores del mundo, pero en especial todos los ojos se posaron sobre una joven de 18 años, que lleva en su espalda un apellido un poquito conocido para el mundo.
Trinity Rodman, hija de la leyenda de los Chicago Bulls, Dennis Rodman, se presentó con apenas 18 años y con la ilusión de hacer historia. Sin mucho preámbulo la pequeña que no pudo jugar para la universidad a causa de la pandemia de coronavirus, se presentó en el sorteo de manera sorpresiva y batió un récord.