El clasico tuvo lugar en el predio Aimar a primeraas horas del Domingo. El encuentro dirigido por Erika Chavez y con todas su condimento de un clasico termino en 0 por 0 . Pero una de las culpables de éste resultado fue Micaela Altamirano, la arquera de Atenas quien atajo el penal que hubera significado el triunfo de las leonas.
«El partido como todo clásico es un todo o nada, creo que en el primer tiempo, los primeros minutos Estudiantes dominó mucho, tuvo jugadas claves, tiros libres que supe resolver, y Atenas supo amoldarse a ese juego no dejando que nos lastimen, y adentrarnos en nuestro juego que terminamos siendo superior». comenta Micaela sobre la primera etapa del partido.
«Ya en el segundo tiempo fuimos claros dominadores, si bien nos falto el gol, creo que la actitud del equipo fue notable, los últimos minutos ellas obtuvieron un córner, lo patean queda corto y mi compañera vuelve a despejar, otra vez córner, queda la pelota en el área le cae a una jugadora de Estudiantes y remata al arco, logro taparla y queda en el aire, mis defensoras quieren bajarla y viene una mano, penal para ellas».
«Sinceramente sentimos que era injusto por como se dio todo el partido. Me llama mi entrenador Gustavo y me dijo donde podría llegar a patear la jugadora, en el momento yo me queria ir con el arco en cero, es algo que nos proponemos las arqueras, patea y la decisión final fue palo izquierdo, siento que la atajó, busco el rebote, me levantó y se terminó el partido, escucho el grito de felicidad de mis compañeras, y es la satisfacción mas linda que uno puede generar, creo que en lo personal no fue el partido, sino lo que vengo trabajando durante mucho tiempo y tengo la suerte de estar en un equipo que contagia confianza».