Yo quería tener una liga. Y eso se dió. Jugué mucho tiempo. Y fui muy feliz siendo parte de la organización. Ese es mi gran premio.Lo más importante: la pieza fundamental de la Liga son las jugadoras! Sin jugadoras no habría Liga. Importa quien dio lugar y tuvo la idea. Importa quien aportó económicamente y quién difundió pero lo que más importa son las jugadoras. Por eso es TAN IMPORTANTE que haya fútbol infantil juvenil femenino.
Primero que nada considero que es muy pertinente y atinado que el primer torneo oficial de categorías infanto-juveniles que se dispute bajo la órbita de la Liga lleve el nombre de Mariana Ferretti. Primero por lo que significa como mujer y como mujer deportista. Mariana ha demostrado ser una luchadora empedernida e incansable por todo lo que considera valioso. Y no hablo sólo de lo deportivo o de ella como profesional. Mariana le ganó el partido de su vida a un acv y a partir de ahí no creo que haya algo o alguien que a ella se le presente y no pueda superarlo.
Mariana Ferretti fue quien llegó a la UNI para darle el salto de calidad que necesitaba y merecía dicha disciplina.
Ni bien empezó proclamó con fuerza que el equipo (y la disciplina) necesitaba COMPETENCIA.
Esto generó que el equipo de la Universidad disputara torneos internaciones como el Ba Cup. Del cual formó parte durante 4 temporadas seguidas.
Pero Mariana quería competencia sistemática, organizada y sobre todo oficial.
Fue entonces cuando me comentó su idea de llevar a la Liga un proyecto que abogara en favor de un torneo oficial para las mujeres que jugaban al fútbol.
Ese proyecto fue redactado por ambas. Nos llevó mucho tiempo y eran días de sentarnos, pensarlo y escribir. Borrar y volver a escribir.
A su vez, a través de un mail me contacté con quién en ese momento estaba a cargo de responder consultas por ese medio (Carlos Cofré) (2011) y le pedí que nos dejara presentarles el proyecto. Una vez teniendo lista la idea principal nos juntamos en reunión con quién era el presidente en esa época (2014) (Norberto Ferrero) y desde ahí se puso en marcha la planificación de lo que sería la ejecución de dicho proyecto. Que se fue modificando favorablemente ya que hubo muy buena recepción por parte de la Liga.
Lo primero que se hizo fue invitar vía mail a todos los clubes a participar.. Se acordó fecha de primera reunión y tras eso vino la planificación del primer torneo oficial. Habiendo 7 equipos interesados en participar se pautó un torneo todos contra todos y por la pica disponibilidad de espacios se acordó que un formato viable podría ser el de las súper fechas, dejando la posibilidad al equipo local de recaudar y yendo rotando los escenarios de manera que todos pudieran tener las mismas posibilidades.
De esa programación me encargaba yo. El presidente de la Liga me había autorizado a ser la organizadora. Era raro siendo jugadora de uno de los equipos participantes pero siempre me vali del valor de la equidad para tratar de que todos pudieran estar conformes con la organización. También se acordó que fuese cada 15 días.
El torneo empezó en agosto de 2014. Y tras cada fecha disputada lo que hacía era enviar a la prensa (vía mail o Whatsapp) lo que habían sido los resultados y algunas imágenes que yo misma generaba. Mi intención era que se difundiera en medios masivos la actividad.
Me sirvió mucho tener en su momento muy buena relación con periodistas locales que no dudaron en difundir: Fernando Rivero, Diego Borghi, Alfredo Undurraga fueron los primeros en difundir la info. Luego apareció David Pedraza para darle una entidad propia a la difusión. Y Alberto Llobel quien llevaría la disciplina al papel del diario.
Mi humilde aporte a la Liga fue este: ser quien organizaba los primeros partidos, las primeras fechas. Y difundir la actividad. Todo lo que era modalidad y reglamentación se acordaba entre todos los delegados de los clubes en reuniones que se llevaban a cabo lunes por medio en la Liga.
No quisiera olvidarme de nombrar a algunas personas pero entre las más importantes para lo que fue esa primera prueba piloto de torneo oficial (hasta 2015 no hubo fichaje oficial) fueron: Carlos Gariboglio, Romina Cuello, Verónica Britos, Alejandro Arguello, Estela Ganzer. Todos ellos aportaron desde el lugar que les tocaba para que la Liga fuera creciendo.
En 2017 elijo salirme de la organización por cuestiones personales y por considerar que las bases estaban sólidas para quien quisiera continuarlo pudiera hacerlo tranquilamente. En mi lugar quedó Alberto Llobel. Quien llevó muy bien adelante toda la organización y tenía un punto muy fuerte a su favor: como trabajaba en el Diario Puntal dedicaba páginas enteras (y a veces más de una página) a difundir la actividad. Llobel quedó fuera de la organización con la elección que arrojó como presidente a Tossolini.
Pero lo importante aquí es resaltar lo siguiente: no importa quien esté a cargo mientras el objetivo sea el mismo: que el fútbol femenino sea organizado, sistemático y que siga creciendo.
Poner el foco en lo formativo es lo más importante de todo ya que es lo que permite que el proyecto sea sostenible en el tiempo.
Por eso aprovecho este espacio para APLAUDIR Y AGRADECER a todas las personas que se involucran desinteresadamente en esta disciplina y han logrado hacer del fútbol femenino una actividad que le ganó al prejuicio social y se ha convertido en un espacio no sólo de competencia deportiva sino también de igualdad de género. Porque se han ganado mucho más que simples copas desde que comenzó la actividad.
Texto Dianela Aguirre.
Pionera de la Liga regional del Futbol Femenino